Tasador agrícola
Los propietarios de fincas y parcelas pueden llegar a verse afectados por una expropiación o por una ocupación de sus terrenos por una administración pública que emprende una obra civil.
Carreteras, autopistas, parques eólicos y líneas de ferrocarril son las obras más frecuentes que provocan expropiaciones, pero no son las únicas. Cuando se pone en marcha una expropiación se le ofrece al propietario una cantidad de dinero para compensar la pérdida forzosa de su terreno, de los cultivos que tuviera o por la incapacidad temporal para llevar a cabo normalmente su explotación. Esa cantidad suele corresponder a un importe por metro cuadrado que está estipulado en unas tablas genéricas de la administración. Suele pasar que ese importe es menor del que realmente corresponde al daño y a los perjuicios generados por la expropiación o la ocupación.
Por otro lado, la administración se basa en el Catastro para expropiar, y no en las escrituras o en la realidad física del terreno.
La intervención de uno de nuestros peritos le permitirá saber cuál es el valor objetivo del terreno expropiado y conocer la superficie realmente afectada después de que se lleven a cabo las obras previstas.